Con la llegada del calor vienen también algunos cambios para adaptar nuestro armario y nuestro hogar a las altas temperaturas. Lo ideal es optar por textiles y tapizados más frescos, y este sentido las fibras naturales son sin duda la mejor opción.
Las fibras naturales proporcionan una mayor transpiración y ventilación natural. Son resistentes, ofrecen un mejor aislamiento térmico y resultan muy agradables al tacto. Todo ello sin olvidarnos de que tienen numerosas ventajas para el medio ambiente. De hecho, son la opción más sostenible, ya que los procesos de fabricación son respetuosos con el medio ambiente, reduciendo al mínimo la generación de residuos y utilizando una menor cantidad de energía.
Si quieres crear un ambiente fresco en tu casa este verano, a continuación te contamos cuáles son los mejores tejidos para la decoración de interiores.
Las fibras naturales más buscadas este verano
Sin duda, las fibras naturales son los tejidos que más triunfan con la llegada del verano. Cortinas, cojines, tapizados… ¡Renueva todos los textiles y dale un aire nuevo y más fresco a tu hogar!
Algodón y lino, un clásico que nunca falla
El algodón y el lino son los tejidos por excelencia del verano. Estas fibras naturales son frescas, ligeras y cómodas, absorben la humedad y resultan muy económicas. Y lo mejor de todo es que tampoco dan sensación de frío cuando llega el invierno, por lo que son perfectas para cualquier época del año.
Tanto el lino como el algodón son tejidos fuertes, muy resistentes y agradables al tacto. De este modo, resultan muy útiles para tapicerías, cortinas o alfombras. Lo más recomendable es optar por colores claros, más alegres y luminosos. Eso sí, si tienes niños o mascotas en casa, tal vez sea mejor decantarse por colores más oscuros que consigan disimular más las manchas.
Sisal y henequén, fibras naturales, frescas y desenfadas
El sisal y el henequén proceden de la especie del agave y se caracterizan principalmente por su color blanco amarillento, su durabilidad y su resistencia. Además, son fibras muy agradables al tacto. Al igual que el lino y el algodón, no absorben la humedad tan fácilmente y son biodegradables. Estas propiedades hacen que sean muy utilizadas tanto en interiores como en exteriores para tapicerías, moquetas o alfombras.
Piel natural, una opción también para el verano
¿Quién dijo que la piel no era para el verano? Los sofás tapizados con piel natural retienen mejor el calor en invierno y durante los meses de verano resultan bastante frescos. Además, la piel natural es un material muy resistente, elegante, agradable y suave al tacto. Eso sí, ten en cuenta que los sofás de piel sintética no tienen ese efecto termorregulador y no resultan tan transpirables.
Ahora ya sabes qué fibras se adaptan mejor al verano, echa un vistazo a nuestro catálogo de telas online y encuentra una amplia variedad de tejidos para tu hogar.